Una forma muy estricta y bastante eficaz de aplicar seguridad a nuestro documento es asignándole una contraseña para que únicamente la persona que conozca esa contraseña puede abrir, modificar, etc., el documento. Una contraseña (o palabra de paso, Password, en inglés) es una combinación de 15 caracteres (en el caso de Word 2003) que pueden contener tanto letras como números y que utiliza un sistema de encriptación para convertir el texto introducido en una cadena de caracteres indescifrables.
Accediendo por el menú Herramientas - Opciones en la pestaña Seguridad podemos ver este cuadro de diálogo desde el que introduciremos las contraseñas.
En la pestaña de Seguridad podemos aplicar 2 tipos de contraseñas distintas que se utilizan para diferentes motivos.
- Contraseña de apertura: Controla el acceso al documento. Al intentar entrar al documento solicita la contraseña.
- Contraseña de escritura: Controla la modificación del documento. Al intentar modificar el documento (escritura, borrado o cualquier modificación) solicita la contraseña.
al escribir una contraseña nos aparece otro cuadro de diálogo para que volvamos a repetir la contraseña. Si añadimos, por ejemplo, una contraseña de apertura, al intentar abrir el documento nos solicita contraseña para poderlo abrir como vemos en la imagen.
Y si nos equivocamos o la desconocemos, nos aparece un cuadro de diálogo como vemos ahora.